Gran parte de lo que hemos visto en esta guía se refiere a operaciones que realizamos
en solitario. Nos conectamos a la red solas, enviamos y recibimos correo solas, publicamos
mensajes en los foros y publicamos nuestras propias páginas solas. Inclusive llegamos a
las salas de chat solas, donde una vez dentro ya sí finalmente interactuamos y
compartimos en tiempo real con otras personas.
Ahora, imagínese la posibilidad de poder estar en contacto en cualquier o en todo
momento con otras personas en tiempo real, consultarlas al tiempo que escribe un informe o
prepara una presentación, preguntarles su opinión mientras trabaja y recibir su
respuesta en forma inmediata sin tener que esperar la llegada de un mensaje de correo o su
publicación en un foro.
Esto es precisamente uno de los atractivos principales de varios programas que nos
permiten establecer un círculo de amistades y colegas en línea con los cuales podemos
colaborar e interactuar mientras estámos conectadas a la red.
Su funcionalidad va más allá de las simples conversaciones e intercambio de
opiniones, haciendo realidad finalmente para la mayoría de las usuarias la promesa de una
oficina sin límites y la verdadera cooperación por Internet.
Veamos primero de que se tratan estos programas y cómo funcionan.
Lo primero a señalar es que a diferencia del correo-e, los newsgroups y las salas de
chat, no existe un estándar para estos programas, por lo que son incompatibles entre sí.
Lo segundo es que afortunadamente son gratis actualmente.
Para poder usar esos servicios, debemos obtener una copia de estos programas en
Internet e instalarla en nuestra computadora. Al configurarla, debemos entrar nuestros
datos y seleccionar una identificación o apodo (parecido a los nicks del chat), con la
cual se asociará un único número de identificación.
En el futuro, cuando estemos conectadas, el programa se ejecutará automáticamente en
el trasfondo de nuestra computadora, permitiéndonos trabajar normalmente con el resto de
nuestros programas y aplicaciones. Pero ahora las personas que tengan nuestro número de
identificación podrán saber que estamos en línea y contactarnos en tiempo real, ya sea
enviándonos mensajes, convidándonos a un chat o conversación, e incluso enviándonos
archivos o direcciones de páginas web que desean mostrarnos.
De igual modo, nosotras sabremos si las personas cuyos números de identificación
conocemos (y que incluimos en una lista de conocidos o círculo de amistades en el
programa) están conectadas y podemos contactarlas para respuesta inmediata.
Muchas personas comparan estos programas con los populares beepers (audiolocalizadores)
del mundo real, ya que podemos recibir un mensaje inmediatamente no importa qué programa
o actividad estemos realizando en nuestro computador y sin tener que revisar el correo-e o
visitar los foros. Pero dada su facilidad para que respondamos inmediatamente e incluso
para que podamos entablar conversacions tipo chat, cabría más llamarles de
"celulares virtuales" que de beepers.
Recordemos que para poder ver las otras personas conectadas en Internet, éstas deben
usar el mismo programa que nosotras y debemos además conocer su número de
identificación. Existen varias opciones que nos permiten mantener nuestra privacidad,
tales como el que nuestra información personal o número de identificación no estén
disponibles al público y el que otros usuarios no pueden colocarnos en su lista de
conocidos sin nuestro consentimiento.
Con una creciente población, estos programas son un gran lugar para hacer amistades y
conocer personas de intereses comunes, así como una herramienta valiosísima para la
comunicación y estrecha colaboración en línea con nuestros colegas y compañeras.
El más popular de estos programas, Mirabilis ICQ, tenía en mayo de 1998 más de 11
millones de usuarios y récord de más de 2 millones de usuarios conectados a la red
simultáneamente.
Para más información y obtener una copia de estos programas, visite sus páginas web: